Caminar por Buenos Aires es un descubrimiento constante. A cada paso, una calle, un farol, un balcón, un cartel, un pequeño parque, hacen que frenemos la marcha. El Pasaje Libertad y la Rue des Artisans en el barrio de Recoleta son de aquellos lugares. Casi escondidos, un mismo pasaje original, ahora con dos entradas diferentes y antagónicas (por la calle Arenales y la calle Libertad), podrían pasar desapercibidos si estamos con prisa o con la mirada poco atenta.
Y eso sería una lástima, porque nos estaríamos perdiendo uno de los pasajes más hermosos y antiguos de Buenos Aires (aunque ahora sean dos). ¿Estás preparado para conocer el Pasaje Libertad y su vecino Rue des Artisans?
Con su forma en “L”, el Pasaje Libertad / Rue des Artisans fue construido en el año 1887 por el arquitecto italiano Giuseppe Bernasconi como un pasaje único. Contorneaba el grupo de viviendas que ocupaba una gran parte de la manzana, teniendo una salida por la calle Libertad y otra por la calle Arenales. Sin embargo, con el correr de los años, una pelea familiar de por medio y con las diversas modificaciones urbanas que sufrió Buenos Aires, el Pasaje Libertad fue dividido, convirtiéndose en dos pasajes con entrada independiente y con estilo y estética diferente: de un lado el Pasaje Libertad, del otro lado la Rue des Artisans.
Es posible vislumbrar la separación de los pasajes y percibir como antes eran uno solo. Comunicados y alejados al mismo tiempo (¿nadie habrá querido juntarlos nuevamente?).
Por un lado –si ingresamos por Arenales– nos encontramos con la Rue des Artisans: edificaciones blancas con detalles en negro, faroles y una placa de mármol con letras doradas en su entrada que señala el nombre del pasaje.
Fue refaccionado con un marcado estilo parisino, intentando confundirnos y hacernos sentir que estamos caminando por Paris por un segundo. Hay algunos bancos para sentarse, toldos a rayas, persianas de metal y unos árboles pequeños.
Ya del otro lado –por la calle Libertad– el Pasaje Libertad es otro. Cálido, con jarrones blancos y palmeras en el corredor. De estilo italiano, procura remontarnos a la región de la Toscana.
En las ventanas del Pasaje Libertad hay flores y el piso en rombos. Sobresale el naranja (me hace pensar en mis días en Roma más que en la región de la Toscana, Roma es naranja para mí). Se repiten las persianas de metal y los faroles.
El complejo pensado originalmente como residencial, hoy le cede su planta baja al comercio. En el Pasaje Libertad y en la Rue des Artisans conviven locales de diseñadores de moda, decoradores, artistas y arquitectos.
Los locales son realmente exclusivos y vale la pena entrar también para ver cómo aprovecharon la antigua estructura.
Siempre es bueno andar con los ojos bien abiertos, en sintonía por donde vamos caminando. Disfrutar del camino, que a veces suele sorprendernos más que el destino al que nos dirigimos. Así uno puede encontrarse con el Pasaje Libertad y la Rue des Artisans o con tantos otros recovecos que guarda Buenos Aires.
Pasaje Libertad | Informaciones prácticas
Dónde | Pasaje Libertad
Direcciones | Libertad 1240 y Arenales 1239
Cómo llegar | La Avenida Santa Fe se encuentra a 150 metros del Pasaje Libertad. Por allí pasan numerosos colectivos (como el 59, 152, entre otros) y a 400 metros está la estación del Metrobús “Av Santa Fe” con los colectivos 67, 70 y 100.
Viajar a Buenos Aires | Informaciones prácticas
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¿Ya visitaste el Pasaje Libertad? Dejame un comentario si querés compartir alguna otra información sobre su historia o también sobre nuevos locales, etc.
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Mi comentario se encuentra en Facebook, agregado el 2 de agosto de 2015 a continuación de este articulo del blog. En él aclaro que los immuebles fueron renovados por mi padre, el arquitecto Gaston Mallet, y que el inmueble que da sobre Libertad era propiedad de mi abuelo, don José Tonin. También aclaro que la pared se levantó a pedido de los inquilinos, a quienes les molestaba el constante tránsito peatonal y el barullo producido por los vendedores de comestibles y otras mercaderías.
Muchas gracias por toda la información, Dionisia! Siempre es bueno conocer un poco más la historia de los lugares =) Saludos!
Hola, en la librería que está junto al Pasaje Libertad compré hace un tiempo algunas revistas de arquitectura antiguas y en una había un artículo sobre una “Residencia en Mar del Plata”, que resultó ser El chalet “Atlantis” de la familia Dose, construido por Gaston Mallet; cosa que descubrí estando sentado en un banco del pasaje, ¡qué casualidad! ¡Saludos!
Qué lindo lugar elegiste para leer! Saludos!
Gracias. Me alegro que Mallet no esté olvidado. Acabo de terminar un libro sobre el ingeniero Alula Baldassarini, quien fue gran impulsor del estilo pintoresquista marplatense y también del estilo Mar del Plata. Dicen que el estilo es una fase del eclecticismo, pienso que romántico por lo de regionalista, pero decididamente no tiene nada de clásico. Hubo otros arquitectos que también agregaron su trabajo, pero casi todo ha desaparecido. Menos mal que el Chalet Normandy, de Mallet, está protegido. Denise
Hola Dionisia, en general, me siento más identificado con el arte del pasado que con lo moderno… yo tengo el libro que Cedodal editó sobre Baldassarini, y hace un tiempo fui a sacar fotos a su chalet normando de la calle Sarmiento, es increíble que esté en un estado de total abandono y que no hayan logrado protegerlo todavía, muy triste. Me tomé la libertad de solicitarle amistad en Facebook, cordiales saludos.